Para saber cómo evitar el efecto curling en la impresión 3D, primero debes conocer de qué se trata dicho efecto. La impresión 3D ha sido creada para que la fabricación de piezas sea un proceso más rápido y menos costoso al utilizar menos materiales.
No obstante, debes tener en cuenta que con la tecnología de impresión 3D no siempre conseguirás un resultado perfecto. En este artículo se describirá la forma de evitar el efecto curling, sigue leyendo.
¿Qué es el efecto curling?
El efecto curling en la impresión 3D es la deformación que aparece en las capas de arriba de las piezas fabricadas. Esas deformaciones son mas visibles en los bordes de la pieza. Al no ser una pieza con la forma exacta puede que no funcione correctamente.
Lo que causa el efecto curling en la impresión 3D es que cuando el material para fabricar la pieza sale por la boquilla, la temperatura que posee en ese momento impacta con la que existe a su alrededor. Es decir, el material se enfría de forma brusca al hacer contacto con el ambiente que lo rodea.
Para fabricar las piezas con la tecnología 3D se necesitan temperaturas muy altas, ya sea para trabajar con plástico o con metal. Estás temperaturas pueden rondar los 200°C o más. El contacto brusco del material muy caliente con la temperatura ambiente hará que el mismo se enfríe violentamente creando la deformación en sus capas superiores.
Los métodos a utilizar para evitar el efecto curling en la impresión 3D
Como ya conoces la causa que deforma las piezas fabricadas con la tecnología de impresión 3D, entonces sigue estos consejos para evitar el efecto curling. Es lógico pensar que la forma de que no se deformen las piezas es controlando la temperatura que las rodea al momento que se están fabricando.
Para lograr ese control de la temperatura utiliza una impresora 3D que posea un área de fabricación cerrada o que sea precalentada cuando se vaya a comenzar a fabricar. Si la impresora se puede cerrar al momento de elaborar las piezas, se evitarán las corrientes de aire y que la temperatura de fabricación de la pieza caiga de forma violenta. Un recinto cerrado para tu impresora 3D es lo ideal.
En relación al precalentamiento, se puede realizar en la bandeja de impresión. Cualquiera de las dos opciones evitará que las capas del material se enfríen de forma brusca y esto provoque su excesiva expansión. Por consiguiente, equilibrar las temperaturas de fabricación con la del ambiente circundante es la solución para que las piezas elaboradas no tengan defectos de deformación.
En el caso de que tu impresora 3D no posea el recinto cerrado, tienes la opción de colocarla dentro de una cámara de impresión. Si consigues controlar la temperatura del ambiente en el área de fabricación de las piezas, evitarás el efecto curling.
Si equilibras la temperatura ambiente con la temperatura de fabricación de las piezas, se puede evitar el efecto curling en la impresión 3D
Si llegaste hasta aquí, ya conoces lo que causa el efecto curling en la impresión 3D. Quienes fabrican las impresoras 3D, teniendo esto en cuenta, les proporcionan un recinto cerrado. El mismo conservará una temperatura adecuada y no permitirá el paso de corrientes de aire.
Utiliza las mejores impresoras 3D del mercado y fabricarás piezas plásticas o metálicas de calidad. El objetivo es que ninguna de tus piezas presente errores de fabricación, y que por tal motivo sean devueltas. La relación precio-calidad es fundamental. Elaborar piezas baratas, pero defectuosas no es rentable para ninguna empresa.