En ocasiones aparecen los hilos o stringing en impresión 3D. Es un escenario que no queremos experimentar cuando estamos imprimiendo en 3D, pero se puede solucionar y aquí te diremos cómo.
Se trata del problema más común, sobre todo cuando estamos novatos en el uso de este tipo de tecnología. Es muy probable que nuestras primeras piezas tengan hilos.
¿Por qué se producen los hilos o Stringing en impresión 3D?
Por lo general los hilos en impresión 3D se producen cuando el hotend hace su desplazamiento sin moldear filamento.
Es posible que durante su recorrido deje algo de filamento, que se cristaliza en forma de pequeños hilos dejando como resultado una maraña con el aspecto típico de una telaraña.
Puede deberse a dos factores. Es posible que en lo interno del fusor exista una presión positiva, pero también puede ser que el filamento este en estado muy líquido.
Incluso puedes tener hilos o stringing en tu impresión 3D más gruesos o más fino dependiendo del material que uses.
Si tu fusor es de mala calidad, también pueden aparecer los hilos. En ese caso sería más notable el problema, pero por lo general las impresoras con esta tecnología incorporar un fusor de excelente calidad.
¿Se pueden evitar los hilos o Stringing en impresión 3D?
Para que no se formen los hilos en impresión 3D, la máquina debe realizar un proceso en particular. En medio del travel o recorrido que realiza el fusor, el filamento no debe salir por la boquilla.
En su proceso óptimo, la impresora debe retirar el filamento dentro del fusor cuando este viaje de un punto a otro, luego tiene la función de moldear el filamento otra vez.
Si quieres utilizar esta tecnología debes conocer todos los parámetros que condicionan una buena impresión. De ellos dependerá que no aparezcan los hilos o stringing en impresión 3D y también la calidad de nuestra impresión.
A continuación te explicamos esos parámetros:
Es importante determinar la distancia de retracción
Es importante porque tienes la opción de establecer hasta donde puede retroceder el filamento. Lo puedes hacer configurando la distancia correcta.
Toma en cuenta que, mientras el cabezal tenga mayor retracción, las probabilidades de tener hilos en tu impresión 3D serán menores. Pero, debes tener cuidado en la configuración, puesto que si le das demasiada retracción pueden aparecer burbujas de aire en tu impresión.
Por otro lado, si la retracción no es suficiente tendrás fuga de filamento y se formarán los tan temidos hilos. Establecer una retracción justa significará que tus piezas en 3D sean de excelente calidad.
También establece la velocidad de retracción
Si el filamento se retrae con la velocidad necesaria no tendrás hilos o stringing en tu impresión 3D. Con la velocidad más alta de impresión la producción de hilo será escasa y es que, el filamento se retraerá tan rápido que será muy difícil que se formen hilos.
Ahora, si la velocidad es en extremo rápida, puede ocurrir que el filamento se desconecte de la pieza dentro del cabezal y ocasionar otros problemas. Es posible que se obstruya la boquilla o que queden zonas sin depósito de filamento.
Debes encontrar un punto de velocidad intermedio para evitar estas dificultades, por lo general funciona entre los siguientes valores: prueba con 40mm/s o 60mm/s.
Velocidad y temperatura de impresión
La velocidad y la temperatura de impresión son dos factores que pueden causar hilos o stringing en tu pieza 3D. Si el fusor se tarda mucho en su recorrido puede llegar a gotear filamento y formar hilos.
En ese sentido, si se desplaza a mayor velocidad, los movimientos cortos serán tan rápidos que no podrán formarse hilos.
En cuanto a la temperatura, si no la ajustas correctamente, es muy probable que tengas hilos en tu impresión 3D. Con una temperatura alta el material de impresión se vuelve más líquido y tiende a gotear a través de la boquilla.
Si la temperatura es muy baja se elimina el goteo, pero es posible que el filamento no se funda adecuadamente y ocasiones graves problemas, como por ejemplo un atasco del material.
Puedes probar con intervalos de temperatura entre 5-10°, pero recuerda que nunca debes bajar la temperatura por debajo de lo que estipula el fabricante.
En resumen, seguir estos parámetros te ayudarán a tener piezas limpias, libres de hilos o stringing en tu impresión 3D. Si las pones en práctica serás un experto evitando los molestos hilitos.